Los arquitectos Simon Guy y Steven A.Moore afirmaron recientemente en su articulo Sustainable Architecture and the Pluralist Imagination que tras tres décadas de debates sobre arquitectura sostenible y la búsqueda de alguna forma de consenso para una mejor practica ambiental universal parece haber fracasado.
La diversidad de visiones sobre como la arquitectura sostenible puede ser, que aspecto puede tener, donde puede estar localizada, que tecnología puede incorporar, con que materiales puede ser construida y así sucesivamente, crean dudas y confusiones en el sector sobre cual debe ser el modelo de arquitectura sostenible definitivo. Por ejemplo James Wines menciona que "una proporción importante de la profesión de la arquitectura se ha mantenido ajeno a la magnitud de sus agresiones irresponsables sobre la tierra y los recursos"; decantando-se por el bando de los que creen que la arquitectura sostenible de los últimos años es generalmente superficial y parcialmente falsa, ya que solo en algunos aspectos cumple el requisito de respetar el medio ambiente. Otros como Harry Gordon se posesionan en el bando opuesto, mencionando que ya se a llegado a un cambio tectónico en el pensamiento de diseño, donde la sostenibilidad se está convirtiendo en la corriente principal. El debate a llevado a cabo a una diferenciación entre Light Green Architecture o Deep Green Architecture.
Las vertientes de la arquitectura sostenible, con sus diferentes prioridades y estilos constructivos, y la heterogeneidad en el uso de la palabra sostenible en la arquitectura ha creado crispación entre los profesionales del sector, ya que en ocasiones a sido utilizada vanamente para buscar mayores ventas con una imagen más ética, aprovechando la inexistencia de un modelo único, reconocido e internacional que permita designar que es o no es sostenible. Sin embargo para Guy y Moore no creen que la sostenibilidad se deba analizar unidireccionalmente y mencionan que el reto de la sostenibilidad es más una cuestión de interpretación específica de la situación que de la fijación de metas objetivas y universales. Aun así las cuestiones claves pendientes de responder son: ¿Qué tipo de arquitectura es la que colectivamente queremos crear para el mundo sociol-ecológico en el que tenemos nuestro bienes? y ¿como construimos un futuro mejor ecológicamente con la heterogeneidad sostenible que existe en la edificación?
Las vertientes de la arquitectura sostenible, con sus diferentes prioridades y estilos constructivos, y la heterogeneidad en el uso de la palabra sostenible en la arquitectura ha creado crispación entre los profesionales del sector, ya que en ocasiones a sido utilizada vanamente para buscar mayores ventas con una imagen más ética, aprovechando la inexistencia de un modelo único, reconocido e internacional que permita designar que es o no es sostenible. Sin embargo para Guy y Moore no creen que la sostenibilidad se deba analizar unidireccionalmente y mencionan que el reto de la sostenibilidad es más una cuestión de interpretación específica de la situación que de la fijación de metas objetivas y universales. Aun así las cuestiones claves pendientes de responder son: ¿Qué tipo de arquitectura es la que colectivamente queremos crear para el mundo sociol-ecológico en el que tenemos nuestro bienes? y ¿como construimos un futuro mejor ecológicamente con la heterogeneidad sostenible que existe en la edificación?